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domingo, 29 de abril de 2012

Jódete, soy feliz.

Hey, hey ¡Ya volvemos! Bueno, antes de continuar, e de decir, que tal vez, no me exprese con claridad en mis entradas. O tal vez esa es la sensación que me doy. Así que en caso de que algo no lo entendáis y os interese, solo tenéis que dejar un comentario y yo encantada, os lo explico. Bien, no me acuerdo con exactitud de lo que hice el viernes "memoria pez, ON" pero tal vez me acuerde de alguna que otra cosa "memoria pez, OFF" a primera hora tocaba educación física. Pero resultaba, que el profesor tenía otros asuntos, es decir, tenía que continuar con el concurso ese que ya os conté, para otros cursos. Total, que nos pusimos a hacer Lengua, pero la profe, nos ofreció algo a cambio, y es que nos íva a dejarnos salir al recreo a última hora *_* Great! En fin, todos estábamos felices, porque no tocaba matemáticas, yeah. Pero a segunda hora, apareció el director, que es quien nos da matemáticas. Nos dijo que tenía que darnos unas fichas para este puente, nos las dio y felices, continuamos trabajando. Después de horas y horas de estudios, llegó el recreo. Estuve la mayoría del tiempo con Alba: dichosa sea esa puta. María: que la parta un rayo. Noelia: tu te salvas. Laura: tu también. Ismael: te quiero, pero te meto una ostia de regalo. Cris: estaba perdida D: seguramente por ahí, jugando. Cuando finalizó la hora de "juegos" por así decir, llegamos a clase, donde comenzó... El momento que todos estábamos esperando (en realidad, nadie) ¡El examen de música! Antes de hacer nada, le pregunté a Ismael varias cosas sobre el examen, ya que no me voy a permitir suspender. El me dijo que íva a ser tipo test... ¡Y así fue! Aggg, un 10 fijo. Lo mejor fue cuando la profe de música dijo que todos los exámenes ivan a ser así a partir de ahora. Después tocaba conocimiento, pero como bien nos prometió la profe, saldríamos al recreo. Y para allá fuimos. Cristina me llamó a lo lejos y corrí hacia ella.
-¿Hablamos?
Yo encantada la agarré de la mano, y pasamos la mayor parte del tiempo hablando. Derrepente, saqué el tema del abrazo del jueves. Ella me dijo algo que por poco, me hace llorar:
"Me hubiese gustado estar abrazada a ti más tiempo, y no despegarme"
Fue la cosa más bonita que nadie me a dicho en mucho tiempo. También sacó el tema de que le gustaba un chico, ese chico era Alvaro. Pero ella sabía tanto como yo, que Alvaro era el novio de Paula. Pero yo, la dije con toda la sinceridad del mundo, que Paula era muy celosa, y Alvaro estaba agobiado. Ella me preguntó, si yo creo que a el le gusta ella, es decir, Cristina. Yo asentí, a pesar de no estar muy segura. Continuamos hablando, y dando paseillos. Después se fue, y empezó a jugar con los demás. Ella me ofreció ir a jugar, pero me negué, prefería estar sola. Tal vez esto que voy a decir parezca de cuento, pero es verdad. Y solo podía pensar en el abrazo, y en ocasiones, en Ismael. Tras 5 minutos, me senté en las escaleras, Ismael vino y me dijo:
-¿Que te pasa?
Levanté la cabeza y dije:
-Nada, solo quería estar sola.
Entonces, creo, que quiso levantarme el animo. Y empezó a jugar con mi pelo. Me levanté y le dí un codazo. Entonces Candela nos llamó, ya que era la hora de ir cada uno a sus casas. Yo como de costumbre, fui con Alvaro, Alba: maldita sea, Nicol y Almudena. Tenía la cámara, así que les saqué unas cuantas fotos. También compramos algunas chuches. Y así pues. Ayer, no paso nada en especial, estuve vagueando, y en ocasiones, haciendo el tonto. Lo que más se me hizo gracioso ayer, fue por la noche. Mi madre y mi padrastro, estaban viendo una película. Yo me puse en plan: Ay... Que lloro... ¡Corre! :O ¡Dios mio! ¡No! Ohh... Papá... Por todos esos cumpleaños a los que no fuíste... Entonces apareció una escena violenta, y mi madre dijo.
-No puedes ver esto.
A lo que yo respondí:
-Por la mafia, las drogas... ¿A que sí? Pues a mi eso no me afecta.
Entonces se levantó y riendo me llevó a la cama. Se quedo un rato conmigo, siempre hablamos y tal, después, cuando salió a la cocina, aproveché, y me levanté de la cama. Y luego, sin explicación alguna, apareció.
-Metete en la cama.
Empecé a reirme sin control.
-¿Como lo sabías?
-Porque lo sabía - comenzó a reír.
Entonces marchó a la cocina, y yo salí pitando, me tumbé en el sillón del salón, y puse cara de imbecil. Entonces oí decir a mi madre:
-JAJAJA, como pille a esta... Se va a enterar.
Y entre risa y risa, entró al salón y me llevó a la cama. Y así pues, fue la noche más gilipollesca de mi vida. Y por mi parte, nada más que añadir, jojojo, useasé: ¡Hasta la próxima entrada!

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