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domingo, 1 de julio de 2012

Summer.


Hey mis pequeñisimas monstruillas :3 ¡Cuánto tiempo! ¿No creéis? Os he echado mucho de menos en mi ausencia. Definitivamente me moría de ganas de volver a escribir en mi bloggie. Me alegra muchísimo que ganase el gran y adorado apodo: Monstruillas. Un aplauso para las que votaron a ese maravillosisimo apodo (?) y ahora, procedamos a contar como me lo pasé estos dí-illas de "paz"

Para empezar. El viaje fue de 3 horas. Suerte que no soy de esas que se marean en el autobús, que si no... Mira, mejor ni imaginarlo. Cuando llegamos nos sentamos en el césped, yo estaba un tanto agobiada, pero que le vamos a hacer. Comimos los bocatas que nos pusieron nuestras madres mientras presentaban a los monitores. Alberto, Dani, María y Melani. Alberto era clavadico a el de: Luna, El Misterio de Calenda. Que porcierto, me lo perdí.

Después continuamos un día normal en un campamento. Juegos, piscina, risas, bailes... Lo que más me gustó de ese campamento fueron las veladas *si descartásemos las actividades, claro*

Hicimos tirolina, escalada, paseos a caballo, y piraguas. La tirolina y escalada no las hice. Porque claro, la escalada, me daba bastante cague, y me costaba muchísimo, me dolían las manos, y las piernas, y se me hacía imposible, eso quería decir, que si no llegaba arriba, no habría tirolina D: ya que la tirolína estaba allá arriba.

Lo demás, si lo hice. Los paseos a caballo fueron de lo más divertido. Jesús, no paraba de decir: Venga majo, de momento vas bien, procura no caerte ¿Sí? Yo me descohonaba. Y el: La peor experiencia de mi vida. Yo me loleaba, y tal. Yo estaba en plan: Joder, que altura, acho. Entonces fue cuando el caballo empezó a andar... ¡Socorro! ¡Socorro! Aullé. Entonces el caballo subió la cabeza y empezó a comer hojas de los arboles ¡Auxilios! ¡Auxilios! Gritaba. Laura se rajaba viva. Suerte que vino el buen hombre, y me dijo que debía de tirar de las asas, y blah, blah, blah. Luego le cogí el truquillo.

Por no hablar de las piraguas. Dios mai. Unos intentaron ligar conmigo, y con Laura, que estaba conmigo, y tal :3 casi moría, estaban buenos de cohones. Os dejo aquí la conver. Chico buenorro - 1: ¿De donde sois? Yo: De Parla. Chico buenorro - 1: ¿Como os llamáis? Yo: Yo me llamo Marta, y la otra, es Laura. Entonces, dijeron: Encantados ¡Venga! ¡Una carrera! Y yo: ¡Va! Chicos buenorros a coro: 1... 2... 3... ¡Ya! Y empezamos a correr, y a correr, se quedaron atrás, y más atrás. Luego, después de la carrera corrieron y dijeron: ¡Buah! Estábamos siguiendo vuestra piragua. Y yo: Omgggg.Total, que nos tiraron de la piragua. Laura se descohonaba. Y el más buenorro me salpicaba :3 dios, que bien lo pasé con esos dos pivones. Tenía unas ganas de pedirles el Tuenti... Me arrepiento de no haberlo hecho.

Qui más, qui más... ¡Oh! Tambien, el último día hicimos una velada especial. Era por grupos, claro. Porque el campamento se dividía en 4 grupos. Cada uno con su correspondiente monitor. Mi grupo se llamaba: Los Alpinistas. Buah, pedazo velada. Nuestro grupo hizo como un show. Llamado: Tu si que fracasas. Y fue el favorito entre todos los presentes :3 muañaña.

Fue el mejor campamento de mi vida, sin mayor a dudas. Nos regalamos diplomas y todo. A mi por ser la más guay. Jajajajaja.

Aunque no os he contado una cosa... ¡Y es que robaban móviles! Sí, sí. Se encendían las duchas solas, daban golpes, de todo. En fin. Y un maricón, tabah cagao. Yo me meaba de la risa, era como... Paranormal Activity. Pues igual. Todo eso pasó en una noche. Aunque claro, los móviles ya fueron robados hace unos días. El caso que más me asombró fue el de Alba. Que cuando se dio media vuelta tenía la BB encima de la maleta. Yo lo flipaba.

Aparte de todo esto. Este campamento estaba inspirado en que nosotros fuésemos unos exploradores que trabajaban para el gran Ignacio Jones. En fin, fue super divertido.

Y nada mis pequeñas monstruillas. Hasta aquí la entrada de hoy, *debería ser más larga, pero es que llegué ayer, y estoy muy pachuchilla* un besazo enorme, y hasta la próxima.


                 

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